Dormir bien es necesario también para tener una buena salud y rendir todo el día.
Si te preocupa tu sueño, debes leer esta entrada. El dormir bien no solo es un placer, sino como sabrás es también necesario para garantizar largas jornadas de trabajo o estudio, para rendir en el día a día, y no caer enfermos. Para poder dormir a pierna suelta y luchar contra el insomnio, sigue estas reglas.
Reglas a seguir para tener un sueño profundo y reparador
El sueño tiene una gran importancia para nuestra mente y salud física. Sin embargo, no solo se trata de descansar, también se trata de tener una buena calidad de este descanso. Para cumplir este objetivo y contar con un descanso envidiable, te mostramos las siguientes reglas.
1. Descansar lo más pronto posible
Los expertos señalan que hay que intentar dormirse, todas las noches, a las 22:00h. El cuerpo, así, tendrá la oportunidad de recuperarse y, en el caso de madrugar, no costará demasiado levantarse de la cama.
2. Temperatura agradable
En la habitación debe mantenerse una temperatura adecuada. El dormitorio debe mantenerse en una temperatura entre los 18 y 20 grados. Existen estudios que avalan que una temperatura mayor provoca un peor descanso o que se tenga calor.
3. Bajar la intensidad de la luz artificial antes de irse a la cama
La luz artificial puede alterar los patrones de sueño. Dos horas antes de dormir, reduce la intensidad lumínica en tu espacio. Además, al descansar, se debe apagar todo tipo de aparatos electrónicos que tengamos cerca. Las luces pueden ‘engañar’ al cerebro, que las puede registrar como si fuera luz del sol.
4. Haz ejercicio
Las personas que van al gimnasio o hacen ejercicio durante la jornada duermen mejor. Además, duermen antes al estar más cansadas. Es más, suelen estar más relajadas justo antes del dormir, por lo que tendrán menos estrés, el cual es un auténtico enemigo para el sueño.
5. No consumir alcohol o café
Beber café por la noche o a últimas horas de la tarde es una de las peores ideas. Al igual, beber alcohol: aunque el alcohol puede acelerar la llegada del tan ansiado sueño, puede pasar factura en la segunda mitad de la jornada. Y es que, a medida que el torrente sanguíneo procesa el alcohol, el cuerpo se despertará continuamente a lo largo de toda la noche.
6. Ducharse con agua fría antes de irse a la cama
La temperatura del cuerpo es también importante para el descanso nocturno. Desde las 22:00 horas, el cuerpo se enfría para preparar su descanso. Una ducha antes de irse a dormir, con agua fría o templada, especialmente si es verano, te ayudará a descansa.
Si sigues estas reglas podrás dormir bien. No tomar café o alcohol antes de irse a a la cama, controlar la temperatura de la habitación o del cuerpo o bajar la intensidad de la luz, principales claves.