Dormir bien depende de diversos factores, pero entre ellos se encuentra la alimentación. Hoy te vamos a ayudar con este factor extra para que duermas a pierna suelta.
Nuestro intenso ritmo de vida, las preocupaciones, las tareas pendientes que siempre dejamos y que nos andan rondando la cabeza… hay tantas y tantas razones que nos alteran el sueño cada noche que con frecuencia es uno de los problemas que acaban resintiendo nuestra salud.
Por eso desde hace años en vivetucasa.es nuestro equipo de investigación y desarrollo de equipos de descanso se afana no solamente por fabricar los colchones que favorecen tu descanso, sino que además somos conscientes de que existen factores externos que alteran nuestro ciclo vital de sueño, entre esos motivos hay uno que resulta clave y con frecuencia olvidamos: la alimentación.
Para dormir bien es necesario que lleves una correcta alimentación, además de ser un hábito saludable te ayudará a no dar vueltas en la cama cada noche.
Es recomendable que incorpores a tu dieta diaria cereales integrales tales como arroz, maíz, avena y trigo.
Son alimentos que aportan a nuestro cuerpo cantidades de vitaminas del grupo B , grandes aliadas de un buen funcionamiento de nuestra actividad neuronal.
No olvides consumir lácteos tales cómo yogures, leche o queso fresco. Existen mil y una maneras de tomarlos de la manera más rica y sabrosa.
Dormir bien también requerirá que pescados cómo el salmón, atún o sardinas todos ellos del grupo de pescados azules y ricos en Omega 3 formen parte de tu ingesta alimenticia diaria.
Una ración recomendable de frutos secos es la que cabe en el hueco de la palma de tu mano.
Entre horas es recomendable que consumas piezas de fruta fresca.
Nosotros para conseguir un buen descanso nos decantamos por la piña y el plátano como sabrosos aliados.
Por último nos permitimos recomendarte que a la hora de picar algo deseches los snacks procesados o fritos (patatas fritas, cacahuetes fritos, etc.) y optes por un puñadito de nueces, almendras, anacardos o cacahuetes naturales.
Una ración recomendable es la que cabe en el hueco de la palma de tu mano.
No olvides incorporar esta alimentación a tu rutina nutricional que junto a un buen colchón te ayudarán a conseguir que el conciliar el sueño no sea un problema para ti a partir de ahora.