Te damos sencillos consejos con los que mejorar la calidad del sueño.
Cuidar la alimentación, hacer ejercicio físico, comenzar un nuevo hobby,… son muchos los cambios que quieren incorporarse a nuestra vida para que ésta sea más saludable ¿verdad?… No olvides incluir mejorar algo importante de la que depende tu salud: tu calidad del sueño.
En este post te vamos a dar unos consejos con los que mejorar la calidad del sueño y gozar así de una mejor salud. Esto te interesa… ¡¡Sigue leyendo!!
Según la Organización Mundial de la Salud, “el sueño es necesario para tomar decisiones, pensar con claridad, mantener los reflejos y tener un buen estado de ánimo así que reducir una sola hora de nuestro sueño puede afectarnos de manera negativa”.
No olvides que puedes dormir durante muchas horas pero éste puede que no sea de calidad por lo que quizás puedas desarrollar los mismos problemas de salud que si no durmieses la cantidad de horas suficiente.
¿Cuántas horas hay que dormir?
Difícil contestar a esta pregunta ya que cada persona tiene necesidades distintas de sueño, en horas. Además, dependiendo de la edad también serán necesarias diferentes cantidades de sueño.
¿Qué es tener calidad de sueño?
Un sueño de calidad se identifica por caer dormidos pronto, en menos de 30 minutos, plácidamente, despertando solo unas pocas veces en la noche y con menos de 20 minutos de vigilia. Además, el sueño debe ser profundo durante un periodo importante de la noche para que nos resulte “reparador”.
¿Cómo podemos dormir mejor?
Para mejorar la calidad de nuestro sueño deberíamos, en primer lugar, identificar y evitar hábitos que, de forma negativa, pueden afectar a nuestro sueño. Por ejemplo, el tabaco, el alcohol o la cafeína serían elementos a eliminar para dormir mejor.
Los dispositivos electrónicos también son desaconsejables a la hora de ir a dormir ya que se ha demostrado que provocan cierta disrupción del sueño.
Una vez identificados estos factores tenemos que tener en cuenta la importancia que el deporte puede hacer en nuestra higiene del sueño. Hacer ejercicio físico de forma regular nos ayuda a dormir mejor, reducir la ansiedad y el estrés además de otros factores relacionados con el insomnio.
Una buena ducha justo antes de acostarnos también nos ayuda a relajarnos por lo que dormiremos mucho mejor.
Y, sobre todo, un equipo de descanso –base, colchón y almohada- que nos garantice un sueño reparador y de calidad.